Plenilunio azul del 31 de octubre y Halloween

Desde hace siglos la noche de Halloween ha sido utilizada para entrar en contacto con entidades astrales. La palabra Halloween es de raíz anglosajona y proviene de la contracción de All Hallow´Eve, que en castellano se traduce como "Víspera de todos los Santos". El origen la fiesta del fin de verano (fin de la cosecha) es de origen celta y es llamada Samhain. 

Con la cristianización, se impuso el 1º de noviembre como "Día de todos los Santos" y se impulsó un trabajo de reconversión de esta fiesta celta por considerala "pagana". En México esta celebración tiene otros matices y se honra el espíritu de los familiares difuntos con diversos rituales. Aquí está el punto que crea cierto conflicto energético en este plenilunio. Vamos por partes.

LUNA LLENA

El plenilunio, astrológicamente, es un suceso en el que la Luna y el Sol forman una oposición exacta de 180º y, por una cuestión de tamaño y distancia, la luz del Sol se refleja exactamente en la Luna. Todos los meses tenemos una, hasta ahí ninguna novedad.

Esta luna Luna llena se encuentra en el espacio energético de Tauro, en donde también se encuentran Urano y Lilith (aunque este último punto astral está en orbe de influencia más no de conjunción). La Luna da una vuelta alrededor de la Tierra todos los meses y se encuentra con Urano (y todos los planetas) cada mes. El tema de esta Luna taurina en conjunción a Urano es que está en su fase llena y eso no ocurre todos los meses en Tauro, sino sólo una vez al año y no necesariamente en conjunción con otra energía planetaria. 

La energía de Urano es caótica (y esto está relacionado a las características de su campo electromagnético), de manera que a esa energía caótica en un espacio arquetípico vinculado a la naturaleza y sus recursos (en dónde están incluidos desde las más pequeños componentes de la materia física hasta los fenómenos atmosféricos y el campo electromagnético terrestre) se le suma la intensidad de una Luna llena que cierra un ciclo iniciado en mayo con en novilunio en Tauro.

Esto no es todo, sino que toda Luna llena en Tauro implica que el Sol está en su punto opuesto: Escorpio. Estos puntos, en el círculo astral marcan el ciclo vida/muerte/vida, ya que se encuentra en el eje las casas astrológicas II-VIII. En la casa II se manifiestan los fenómenos de naturaleza física, los placeres terrenales y la economía como recurso para la obtención de bienes materiales. En la casa VIII se manifiestan las transformaciones de lo que hay en la casa II. Si la Luna llena marca el final de un ciclo, al producirse en el espacio de Tauro y con una oposición al Sol en Escorpio, se activa el eje de este ciclo de principios y finales que, por estar Urano involucrado, será de manera drástica y caótica. 

No suena demasiado bien en el contexto actual y no me refiero sólo a la situación que tiene al mundo encuarentenado sino a que permanece la Triple conjunción Plutón-Saturno-Júpiter en Capricornio, desarmando sistemas de limitaciones estructurales de manera aceleradísima; con Mercurio retrógrado en Libra (energía que crea malos entendidos en las relaciones humanas) y Marte retrógrado (implicando una reacción de violencia replegada hacia adentro, implosiva, de enojo y victimización) en cuadratura a la Triple conjunción. Nos queda Venus en Libra, entrando a su regencia y poniendo un poco de suavidad a esa compleja configuración astral.

LUNA AZUL

Este fenómeno se vincula al proceso de rotación y traslación de la Tierra alrededor del Sol, que no es de 24 horas exactas y por lo tanto tampoco es de 365 días exactos. Estas inexactitudes se resuelven agregando días cada 4 años y es una de las cuestiones por las cuales nuestra vuelta al sol individual (cumpleaños) no se produce cada año en la misma fecha y hora. 

Entonces hay años en los que tenemos más lunaciones y este es el caso, en dónde hay dos lunas llenas en el mismo mes, fenómeno que se produce cada dos años y medio, aproximadamente. Astrológicamente se puede forzar un significado esotérico vinculado a que son dos cierres de ciclo en el mismo mes, pero no es exacto puesto que la anterior Luna llena fue en Aries y las energías de cierre se dieron en otros espacios e involucraron otras energías.

De modo que, hasta aquí, la importancia de esta lunación viene por el hecho de que se produce en Tauro y en conjunción a Urano, con un cielo cósmico muy tenso. 

SAMHAIN

Como expliqué más arriba, esta celebración es de origen celta y se vincula al final de la cosecha por lo cuál una Luna llena es perfecta para el cierre de ese ciclo. Pero este final de cosecha tenía también una implicación mística, pues como los días comenzaban a hacerse más cortos, el ritual implicaba una despedida a "Lugh" o dios Sol. Los celtas celebraban en esta fecha su fin de año y la señal era la caída de las hojas como símbolo de final de la muerte o iniciación de una nueva vida, de una transmutación espiritual, de una pascua como paso de un mundo a otro. Y como se trata de paso, se abre un portal energético.

Con ese objetivo hacían ofrendas de dulces y frutos (en agradecimiento por la cosecha) y encendían velas para que los difuntos encontraran el camino de la luz y el descanso junto a Lugh. 

De aquí se tomó el cristianismo para celebrar al día siguiente, la festividad de los Santos difuntos y al día siguiente, la de los Fieles difuntos. En el primer caso para honrar a los mártires anónimos y en el segundo, para elevar oraciones por las almas en proceso de purificación espiritual. Como el cristianismo consideraba que Samhain era una fiesta pagana, con la celebración de los días de Santos y Fieles difuntos se pretendía "contrarrestar" la movilización de fuerzas "oscuras".

Esto no tiene nada que ver con la astrología pero sí con los procesos energéticos vinculados a la apertura o cierre de portales cósmicos. Cada Luna nueva es una apertura cósmica y cada Luna llena es un cierre; ambos se producen en espacios opuestos cada seis meses. 

¿Cuál es el problema?

La manipulación energética de estos días. Porque el hecho de que las celebraciones de Samhain y del día de Santos se junten crea una fricción energética entre el mundo de la materia y el mundo espiritual. Esto, con una Luna llena en el eje astral de transformación hace que la energía se potencie y con Urano al lado, esta potencia tiene características energéticas de caos. 

Todos, absolutamente todos los grupos energéticos trabajan en Samhain. Ya sea con energías luminosas o de las otras y cuando digo "las otras" no me refiero a cuestiones de índole religiosa sino a las vinculadas con el punto ciego de luz entre la Tierra y la Luna, que astrológicamente conocemos como Lilith. Ese punto oscuro de la conciencia es el que produce la confusión y lleva a personas que desconocen el verdadero poder de las energías astrales, a hacer cuestiones que las exponen a desequilibrios en su campo electromagnético personal y crean fisuras por donde ingresan las energías que, en este momento, no son adecuadas para una correcta alineación. 

Cada uno es libre de realizar el ritual, oración o práctica que crea conveniente. Desde lo personal y también desde lo astral no recomiendo el encendido de velas, ni danzas a la luz de la Luna llena, ni limpiezas energéticas de piedras o talismanes. Hay que estar muy bien alineado con la energía cósmica y saber protegerse de las influencias a las que nos exponemos si abrimos nuestro campo electromagnético en estos momentos. 

Y aunque no hagamos ninguna de estas actividades, ser concientes de que incluso la meditación puede resultar peligrosa si la persona no protege su campo aúrico porque las energías luminosas y oscuras están en un momento de caos astral para el cierre de un portal. 

Hay que dejar que el portal cierre y que no quede aquí nada de lo que debe estar allá o, de lo contrario, el caos energético no terminará y se volverá más intenso en su precipitación física y material. 

Aceptar el final es el primer paso hacia un nuevo comienzo. Cerremos el ciclo de la muerte, de la enfermedad, de la manipulación. El próximo plenilunio habrá eclipse y el del 30 de diciembre cerrará el año gregoriano. 

Hagamos la tarea energética de soltar HOY, para transmutar nuestro campo electromagnético antes de que las fuerzas astrales nos obliguen.